El agua es un elemento fundamental en la vida cotidiana del hombre. Aunque los recursos son importantes, el consumo de agua es una de las principales partidas presupuestarias de los hogares. De media, consumimos casi 94 litros de agua al día por persona sin darnos cuenta. Para evitar desperdicios y ahorrar agua, aquí hay algunos pasos a seguir.
Cambiar el cabezal de la ducha: una gran manera de ahorrar agua
El inodoro es uno de los principales factores de consumo de agua en un hogar. Actualmente, encontrarás en el mercado muchos modelos de cabezales de ducha ahorradores de agua. Estos dispositivos son relativamente simples de instalar y usar, y todos tienen una función de «parada». Esto evita desperdiciar agua cuando te lavas con champú o jabón, por ejemplo.
Para ir aún más lejos, puede instalar una ducha de chorro de aire. El dispositivo aspira aire y luego lo envía al chorro de agua para lograr un efecto más dinámico. Las teleduchas equipadas con esta función ahorran hasta un 50% de agua en comparación con las duchas convencionales.
Cambiar el grifo para reducir el consumo de agua
A veces, todo lo que necesita hacer es renovar sus grifos para ahorrar mucho dinero en su factura de agua. Para acabar con los despilfarros innecesarios, equípate con dispositivos de ahorro energético, empezando por nuevos grifos.
Para la ducha y/o la bañera, opta por válvulas termostáticas. Estos dispositivos suelen tener dos manijas: una para ajustar la temperatura y otra para modular el flujo. Para el fregadero de la cocina, el grifo monomando es una solución muy económica. Al elegir estas dos soluciones, puede ahorrar hasta un 30% de agua, en comparación con los grifos mezcladores estándar.
El aireador: un dispositivo de elección para ahorrar agua
Colocado a la salida de los grifos, este reductor de caudal reduce considerablemente el consumo de agua. Sabiendo que para una presión de 3 bares se obtiene un caudal medio de 12 litros por minuto, el aireador hidroeficiente permite obtener de 6 a 8 litros. Al usar un ahorrador de agua, puede reducir su consumo de 30 a 50%.
Puede equipar fregaderos, lavabos, lavabos y lavabos con este accesorio, para reducir aún más el desperdicio de agua. Además, los aireadores o aireadores hidroeficientes están casi todos equipados con filtros antical, que les garantizan una buena longevidad.
Instalar un colector de agua.
Si vive en una zona muy lluviosa, instalar un sistema de recogida de lluvia es una idea ingeniosa. El agua de lluvia se puede utilizar para todas las actividades que no requieren agua potable. Así que puedes usarlo para regar tus plantas, lavar tu auto, limpiar el patio, encender el inodoro, etc.
Para aprovechar al máximo el agua de lluvia, instale una cisterna o un barril a la salida de los canalones. Este método le permitirá limitar su consumo de agua potable a lo estrictamente necesario.
Identifique y neutralice las fugas para evitar desperdicios
Las fugas, independientemente de su origen y ubicación, son los principales factores de desperdicio. Si tu consumo sigue siendo tan alto cuando ya estás tomando todas las medidas necesarias para reducirlo, seguramente sea por alguna fuga.
En cuanto tengas una duda, contacta con un fontanero de confianza para detectar cualquier fuga en tu hogar. Además, los profesionales de fontanero cerca tienen habilidades probadas en encontrar y sellar fugas. Estaremos encantados de ayudarle a eliminar todos sus problemas de fugas en una descarga, un grifo y en las tuberías.
Instale una descarga de doble flujo
Los inodoros se encuentran entre los mayores consumidores de agua potable, ya que consumen hasta un 20%. Para tener una idea, conoce que tirar de la cadena te hace perder entre 9 y 12 litros de agua.
Para evitar este gran desperdicio, instale una nueva descarga de inodoro de doble control. Este aparato consume mucho menos (entre 3 y 6 litros de agua), y proporciona una presión de agua más potente, y por tanto una eficiencia óptima sin derroches.
Otros buenos reflejos para ahorrar en la factura del agua
Además de las soluciones técnicas, sepa que hay muchas formas de limitar su consumo de agua. Puede comenzar con pequeños gestos responsables como evitar dejar correr el agua innecesariamente por ejemplo. Cuando laves los platos, es mejor hacer espuma y fregar sin agua, en lugar de dejar el grifo abierto. Haz lo mismo al cepillarte los dientes.
Otro hábito que puedes sumar a tus buenos propósitos es el hecho de prefieren las duchas a los baños. Sepa que tomar un baño es en promedio 150 litros de agua utilizados por 50 litros durante una ducha.